Estimados amigos y amigas del club de lectura
Fue un inmenso placer compartir con todos vosotros la reunión de
ayer, tan enriquecedora y tan participativa. Dije sinceramente, que
sentía la necesidad de volver a leer el libro para redescubrir todos
esos matices que habéis aportado.
Sin duda, fue una grata sorpresa encontrarnos con este libro que
tanto nos enseña del valor de la palabra y de la literatura, de la
importancia de la educación, de la amistad, de la familia y del amor.
Desde los ojos de un joven de apenas 18 años, nos describe la cruda
realidad de los campos de reeducación chinos, durante la revolución de
Mao, sin entrar en la denuncia social abierta. La espontaneidad de esa
edad le hace relatar con humor algunos de los pasajes de su vida
cotidiana allí.
Son finalmente los protagonistas los que "reeducaron" al pueblo y
sobre todo a la sastrecilla, abriéndoles a la música, a la literatura,
al cine y al amor, poniendo el mundo a sus pies.
La literatura y los libros de aquella maleta les salvaron del
infierno. Y de aquella experiencia nace la vocación del autor por contar
historias, a través de la literatura o del cine.
Todo ello narrando con la sensibilidad del que quiere transmitir
lugares, olores, sabores, tactos, y provocar una exaltación de los
sentidos.
Espero que no perdamos esa capacidad de sorpresa con nuestras siguientes lecturas. ¡Ánimo!
Y para poneros en sintonía con el libro que tenéis entre las manos "Momentos estelares de la humanidad" de Stefan Zweig, os envío la crítica que El Cultural del periódico El Mundo, publicó a raiz de la aparición de la novela en el año 2002.
Espero que la disfrutéis.
Nos vemos el próximo miércoles 8 de marzo. Id pensando en
nuevas propuestas de lectura para los meses siguientes, elegidos de
entre el listado que os envíe a principios de año.
Feliz lectura
Teresa
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